domingo, 1 de agosto de 2010










3 comentarios:

Anónimo dijo...

Dulce espera una lastima que esquive la mirada.

persea dijo...

Una sumisa no debe mirar a los ojos a menos que tenga permiso...
Bueno eso dicen...
Tu que crees al respecto?
Un beso

Anónimo dijo...

Jamas he creido en los "dogmas", las miradas dicen mucho, en la mayoria de las ocasiones lo dicen todo. Ternura, desesperación, dulzura, pasión, consuelo....desconsuelo, todo un mundo de emociones que me niego a no gozar. No le temo a una mirada.